La Puerta del Sol de Madrid conocida como EL KILOMETRO CERO. La Puerta del Sol es uno de los lugares más conocidos y concurridos de Madrid. También encontramos el reloj cuyas campanadas, a las 12 de la noche el 31 de diciembre de cada año, marcan la tradicional toma de las 12 uvas y el comienzo de un nuevo año a la gran mayoría de los españoles. Tradición que comenzó cada 31 de diciembre en 1962.
La Puerta del Sol fue en originalmente uno de los accesos de la cerca que rodeaba Madrid en el siglo XV. Esta cerca recogía en su perímetro los arrabales medievales que habían ido creciendo extramuros, en torno a la muralla cristiana del siglo XII. La puerta debe su nombre de un sol que adornaba la entrada, colocado ahí por estar orientada la puerta hacia levante. Aunque desde los siglos XVII al XIX la zona tenía importancia como lugar de encuentro (aquí se encontraba uno de los mentideros más famosos de la villa desde el Siglo de Oro, las famosas gradas de San Felipe), no era una plaza definida como la Plaza Mayor, ocupando la mitad del espacio actual.
Sera la construcción de la Casa de Correos (construida por el arquitecto francés Maquet entre 1766 y 1768; fue posteriormente Ministerio de la Gobernación (Interior) y Dirección General de Seguridad del Estado durante la dictadura franquista y actualmente sede de la Presidencia de la Comunidad de Madrid), la que empieza a sentar las bases urbanísticas de lo que hoy es la Puerta del Sol y su creciente importancia como punto céntrico de Madrid. Tras la conversión de la Casa de Correos en sede del Ministerio de Gobernación (1847), se decide derribar algunas casas de la zona para realzar el edificio y darle seguridad. Como resultado va a ser la creación de una gran plaza.
Entre los años 1857 y 1862, Lucio del Valle, Juan Rivera y José Morer llevan a cabo la reforma de la plaza, dándole su aspecto actual. Para lo que se mantienen la alineación de la Casa de Correos en uno de los lados y construyen edificios de viviendas con fachadas uniformes definiendo un espacio de forma semicircular. En 1959 es reformada por Manuel Herrero Palacios incorporando en su centro una zona ajardinada y las fuentes. En 1986 los arquitectos Antonio Riviere, Javier Ortega y Antonio González Capitel introducen una nueva reforma, tomando más importancia la zona peatonal.
La historia de la Puerta del Sol está repleta de acontecimientos especiales, entre los que se destacamos la proclamación de la Segunda República Española en 1931 o el asesinato del presidente del Consejo de Ministros, José Canalejas en 1912. De sus elementos ornamentales destacamosde : -La estatua del Oso y el Madroño, de unos cuatro metros de altura, obra de Antonio Navarro Santa Fe.
-La estatua ecuestre de Carlos III, reproducción en bronce de Miguel Ángel Rodríguez y Eduardo Zancada de la obra de Juan Pascual de Mena que se conserva en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando. La inscripción en espiral que rodea el pedestal cuenta brevemente la historia del reinado de Carlos III. El monumento mide nueve metros de altura y fue inaugurado en 1994. Con la remodelación de la Puerta del Sol se pretendía dotar al Madrid liberal, en su mismo corazón, de un espacio público suficientemente representativo, pues hasta entonces sólo se contaba con apenas dos plazas de categoría: la plaza Mayor y la plaza de Oriente. La plaza de la Puerta del Sol presentaba una alargada forma bivial típica de las encrucijadas de caminos -forma característica de los encuentros de grandes arterias de comunicación del Madrid histórico-. Estaba constituida por un caserío desordenado del que sólo destacaban por su factura arquitectónica la iglesia del Buen Suceso (en la confluencia de Alcalá con la Carrera de San Jerónimo), la Real Casa de Correos en el frente sur y la Casa de Cordero, ejemplo de la nueva arquitectura residencial, construida en 1845 junto a la embocadura de la calle Mayor sobre el solar del desamortizado convento de San Felipe el Real. El Ayuntamiento promovió la reforma de la plaza en 1852 y contó con un fuerte apoyo del gobierno y de la burguesía. Para su realización se convocó un primer concurso de proyectos en el que se establecía como condición indispensable, el mantenimiento de la alineación sur que formaba el eje de la calle Mayor y la Carrera de San Jerónimo con la Real Casa de Correos. Enseguida se comprobó la complejidad que revestía la operación, especialmente porque se carecía de un marco legal adecuado para llevar a cabo las expropiaciones del caserío. Para agilizar el procedimiento las obras fueron declaradas de utilidad pública en 1854 y acto seguido se iniciaron los derribos. Sin embargo, las obras de reforma no se pusieron en marcha porque al concurso de las obras apenas habían concurrido postores, lo que obligó al Ministerio de Fomento a hacerse cargo de las obras, y cuya primera medida fue encargar la realización de un nuevo proyecto a los ingenieros Lucio del Valle, que trabajaba también en las obras del Canal de Isabel II, Rivera y Morer. Este proyecto lograba un gran espacio urbano mediante una decidida alineación en arco rebajado de todo el frente norte y, a su vez, se conseguía un conjunto arquitectónicamente unificado porque se habían seguido las trazas arquitectónicas de la Casa de Cordero. Este proyecto se hizo realidad en 1862, se había conseguido redefinir formalmente la Puerta del Sol convirtiéndola en un ámbito urbano de monumental centralidad, con un marcado carácter representativo y en polo de atracción para importantes actividades comerciales, administrativas y financieras, hechos que afectarán notablemente a sus calles colindantes, como Preciados, Carretas, Arenal y Ancha de Peligros, que también serán objeto de destacadas remodelaciones. © 2003 Desarrollo, Asesoría y Formación Informática S.A. (DAYFISA) - Universidad Autónoma de Madrid (UAM)
|